Las estrategias de ciencias de datos son cada vez más utilizadas por las empresas españolas, con un impacto positivo en el desempeño organizacional y niveles más altos de resiliencia. Es fundamental que las empresas sean dueñas de sus datos y aseguren su calidad, y que adopten un enfoque data-driven para tomar decisiones estratégicas basadas en análisis e interpretación de datos. La administración de datos propios proporciona flexibilidad y capacidad para abordar las necesidades presentes y futuras del negocio, pero requiere una política de gobierno de datos y una atención adecuada a la integración, calidad y gestión de los mismos.