La transformación digital cambió la experiencia en las estaciones: más rapidez, agilidad y una nueva gama de servicios de conveniencia.
Las industrias están adoptando la tecnología y la gestión de los datos para generar aún más valor en sus modelos de negocios y la industria del petróleo y el gas – especialmente las estaciones de servicio – no son ajenas a este fenómeno.
Por un lado, distintas herramientas tecnológicas – como un ERP por ejemplo- brindan una visión más holística de las operaciones del negocio permitiendo optimizar recursos, reducir costos y maximizar ganancias gracias al manejo eficiente de la gestión de clientes, ventas, administración y contabilidad, recursos, control del material y productos, etc.
Por otro lado, atrás quedan las épocas en las que un mismo empleado se encargaba de cargar combustible y cobrar al cliente de manera poco ágil, con la intermediación de comprobantes físicos y tiempos extensos. Hoy, los sistemas de gestión de pago permiten a los gestores de las estaciones de servicio controlar todo el proceso desde un ordenador o un dispositivo móvil en pocos clics, lo que implica menos tiempo y más eficiencia. La automatización del circuito de hecho, optimiza la gestión de las estaciones y lograr mayores niveles de satisfacción entre los clientes.
Pero además, como parte de una transformación digital integral, hoy se puede pensar en “una estación conectada” que brinda un servicio totalmente personalizado gracias a la integración de los datos.
Las estaciones de servicio pueden hoy utilizar una serie de sistemas de captura de datos que les permitan analizar al cliente (horarios, hábitos, preferencias) y que a la vez personalicen la experiencia de uso de las propias estaciones pero también de sus servicios asociados. ¿El resultado final? Un cambio que derive en la fidelización del cliente y, por ende, más rentabilidad.
Se trata de aprovechar las ventajas de las tecnologías digitales para ofrecer a los conductores los servicios que necesitan, y no sólo vinculados con los automóviles o la carga de combustible. Hoy, la utilización ordenada y sistematizada de los datos apunta a brindar a los clientes la mejor experiencia posible durante su paso por la estación de servicio.
Internet de las cosas (IoT) por ejemplo, permite sensorizar de forma remota desde los túneles de lavado a la iluminación, refrigeradores o los tanques de combustible mejorando así su mantenimiento. Además, esta tecnología contribuye a hacer más sostenibles y eficientes las estaciones de servicio, al generar un ahorro energético.
En otras ocasiones, las tecnologías digitales sirven para conseguir mejoras sencillas, pero que reportan un beneficio directo: los centros de servicios de las estaciones elevan cada vez más la oferta gastronómica para los clientes, de manera que la inteligencia artificial por ejemplo, permite cruzar datos para desarrollar un modelo predictivo que en base a los horarios de asistencia pueda determinar el mejor momento para tener ya lista cierta oferta de pedidos (hamburguesas, panes horneados, entre otros) para que sus clientes se lo lleven en pocos minutos y tengan la experiencia express que buscan en este tipo de experiencias de compra.
La transformación digital también alcanza una nueva gama de servicios para las estaciones. Muchas petroleras ya cuentan con apps que permiten a sus clientes abonar las cargas de combustible, realizar compras online y utilizar a las estaciones como punto de retiro de pedidos, o incluso, son puntos clave para servicios de movilidad compartida.
Desde las apps también se pueden solicitar almuerzos o cenas u otros productos de las tiendas que pueden pre ordenar desde aplicaciones móviles y retirar en minutos, sin bajarse del auto ni hacer filas, solo con un código QR. Incluso, se está pensando en la instalación de lectores de patentes lo que permitirá implementar diversas acciones comerciales con la previa autorización del cliente, elevando de esta manera el nivel de calidad de servicio que ofrecen al día de hoy.
Este es el presente y el futuro de las estaciones de servicio. Todo un abanico de servicios que, gracias a las nuevas tecnologías y la digitalización, seguirá creciendo para hacer la vida más sencilla a las personas.
Julio Cesar Blanco – 3 de marzo del 2023