Las estrategias de Big Data están transformando por completo a la industria de la salud: achican costos, optimizan recursos y permiten una gestión médica integral del paciente.
La recopilación y análisis de grandes volúmenes de información tiene impacto en variedad de sectores, siendo el de la salud uno de los que más se puede beneficiar de su aplicación dado que contribuye así a la mejora de las condiciones médicas de miles de personas.
La industria de la salud genera una enorme cantidad de datos que giran en torno a pacientes, medicamentos, enfermedades, investigación y macrodatos como historiales clínicos, recetas, imágenes médicas, estudios y otros registros electrónicos.
De hecho, solo para 2025, la cantidad de datos relacionados con el sector de salud en España será casi 900 veces más que en la actualidad más debido a la acelerada digitalización pero sobre todo, al desarrollo de aplicaciones móviles relacionadas con la salud y el deporte (dispositivos wearables) capaces de controlar el sueño o medir las pulsaciones y los niveles de oxígeno en sangre.
En este sentido, las estrategias de Big Data ofrecen beneficios al sector médico en múltiples dimensiones. Por un lado pueden brindar indicadores clave de rendimiento para tomar decisiones precisas en términos de financiación y asignación de recursos.
Por otro lado, tanto los profesionales médicos como los administradores sanitarios pueden utilizar los datos para tomar decisiones mucho más informadas y acertadas sobre tratamientos y servicios para los pacientes y mejorar su experiencia como tales.
Por ejemplo, consolidar los datos de los pacientes en un único historial permite una atención médica integrada. La colaboración y comunicación entre los profesionales de la salud para establecer un plan de tratamiento conjunto del paciente es uno de los grandes objetivos de la industria de la salud. En este sentido, las soluciones EDI ( intercambio electrónico de datos, por sus siglas en inglés) resuelven el desafío de la interoperabilidad y la transferencia segura de esos datos al construir una red de sistemas de salud que logran una integración clínica dinámica.
Las soluciones médicas integradas reducen además los costos al habilitar una gestión automatizada, segura y en la nube. Estos últimos puntos son clave para esta industria, dado que hospitales y servicios de salud necesitan extremar medidas para mantener su entorno siempre disponible, pero además, libre de ataques. Una amenaza grave a la seguridad de la red puede poner en riesgo la continuidad operativa y la atención oportuna y de calidad a los pacientes. Para poder implementar sistemas que cumplan con los requisitos mínimos de disponibilidad y seguridad se precisa de una importante infraestructura en hardware, en software y en personal técnico. Dado los costos y tiempos de implementación, actualmente se recurre a la implementación de soluciones en la nube, que permiten economizar a la vez de mantener la disponibilidad y la seguridad de la información.
Las estrategias que implican datos son útiles en muchas otras áreas de la atención de la salud, por ejemplo, en lo referente a la atención al paciente, los chatbots pueden extraer información mediante preguntas sencillas como nombre, dirección, síntomas, médico actual y datos del seguro. Luego, los chatbots almacenan esta información en el sistema del centro médico para facilitar la admisión del paciente, el seguimiento de los síntomas y la comunicación entre el médico, el paciente y el mantenimiento de los registros médicos.
A partir de plataformas de simulación quirúrgica que utilizan técnicas de realidad aumentada y realidad virtual, los cirujanos y los médicos residentes pueden practicar intervenciones en quirófanos virtuales que se asemejan en gran medida a la realidad. Asimismo, el reconocimiento automático del habla y la síntesis de texto a voz pueden utilizarse para ayudar a las personas con disminución auditiva: este sistema puede tomar el discurso del narrador y convertirlo en un texto legible y mostrarlo directamente en una pantalla de realidad aumentada.
La atención domiciliaria encuentra apoyo en servicios basados en la robótica. Se monitorea de manera inteligente, automática y remota a los pacientes controlando el sistema robótico de atención domiciliaria a partir de la recopilación y análisis de datos.
Yendo más allá aún, tecnologías como 3D y hologramas van perfeccionando la calidad de los servicios de salud: las herramientas avanzadas de visualización, segmentación y la impresión 3D permiten modelos anatómicos específicos para cada paciente y se convierten en una potente forma de crear una mejor experiencia médica. En el caso de los hologramas, pueden ayudar a los radiólogos a identificar lesiones o cualquier otra fractura en los tejidos blandos o duros de los pacientes y lo más innovador, todos los registros médicos del paciente pueden almacenarse digitalmente, por lo que un radiólogo puede examinar fácilmente el historial médico.
En definitiva, el uso de Big data para la atención médica promete mejorar la calidad de la atención en toda su extensión y, al mismo tiempo, reducir el costo para todos las partes. Además, tiene el potencial para respaldar varias funciones médicas y sanitarias, mejorando y optimizando la toma de decisiones clínicas y la gestión de la salud de la población.
Julio Cesar Blanco – 25 de agosto del 2022